Las grandes empresas tecnológicas han liderado este proceso inversor adelantándose a los grupos de capital de riesgo en nuevas empresas de IA generativa.
Las grandes empresas tecnológicas, como Microsoft, Google y Amazon, han apostado fuertes sumas en inversión en el campo de la inteligencia artificial generativa (IA). En el año 2023, estas empresas cerraron acuerdos que representan dos tercios de los 27.000 millones de dólares invertidos en nuevas empresas de IA generativa, según datos de PitchBook.
Las apuestas se intensificaron después del lanzamiento de ChatGPT de OpenAI en noviembre de 2022. Este fenómeno destaca cómo todos los gigantes tecnológicos de Silicon Valley toman a la IA generativa como la tecnología de propósito general que marca el futuro de la industria.
La IA generativa ofrece la capacidad de crear contenido nuevo y único, desde imágenes y música hasta textos y diseños, potenciando la innovación y la creatividad. Además, puede automatizar y optimizar procesos de diseño y producción, ahorrando tiempo y recursos al generar soluciones personalizadas y eficientes. Estas capacidades han captado la atención de inversores de las BigTech.
Acuerdos clave, como la inversión de Microsoft por 10 mil millones de dólares en OpenAI, contribuyó significativamente al aumento del gasto en el campo de la IA generativa superando en tres veces más que el récord anterior establecido hace dos años.
Algunos grupos de capital riesgo siguen buscando oportunidades en empresas que crean aplicaciones basadas en «modelos básicos» desarrollados por empresas como OpenAI y Anthropic. Pero se destaca también un espacio inexplorado en dominios de aplicaciones de IA, en el que muchas de las empresas más valiosas en este campo están todavía por descubrir.
Leif-Nissen Lundbæk, fundador y CEO de la empresa de IA generativa Xayn, cree que solo estamos en la punta del iceberg. En declaraciones a Cointelegraph:
“El mercado de la IA no está cerca de saturarse. Actualmente, las empresas han probado suerte aquí y allá, y se han materializado algunas pruebas de concepto. Los verdaderos casos de producción a gran escala apenas están comenzando o aún están por llegar”.
Koch afirma que la afluencia de recién llegados puede dar la ilusión de un mercado sobresaturado de IA, pero considera que la saturación inicial es una fase necesaria para fomentar futuros avances.
Afirma: «La IA nunca estará saturada porque solo estamos en la primera rampa de salida de la superautopista de la IA. Parece saturada porque gente de otros sectores está intentando entrar en este espacio, pero cuando se trata de innovación, ya hay un grupo selecto de empresas que están muy por delante y que llevan décadas en el espacio de la IA. Para poder impulsar la innovación, se producirá una saturación a nivel básico, pero hay actores y empresas de élite que están liderando el futuro de la IA».
Así, nombres de empresas emergentes relacionadas con la IA generativa han entrado en los catálogos de inversión de las grandes firmas. Según María Angeles Barba, analista de News Trends en Wayra (Telefónica), ahora mismo la inversión más interesante se encontraría en una capa intermedia, es decir, ‘startups’ que se encargan de la integración de IA generativa en empresas para potenciar rediseñar, eficientar y sus procesos tradicionales (La IA alimenta unicornios, elcorreo.com)
