La Universidad de Alicante ha publicado el libro: «Paisaje, urbanismo y arquitectura en el campus de la Universidad de Alicante». Una obra colectiva que trata de profundizar sobre estos tres componentes del que está considerado uno de mejores campus universitarios modernos de España incluso de Europa.
Uno de los autores y protagonista fundamental en el paisajismo del campus fue y es José Luis Romeu Lamaignere a quien con motivo de su visita a TJ OST compartiendo esta obra le hemos entrevistado. Muchas gracias también a Antonio Morata, artífice del control de la Arquitectura en el campus quien nos ha asesorado en las preguntas.
Entrevista a José Luis Romeu Lamaignere
¿Cómo ha cambiado el concepto del paisaje en estos 25 años desde que se pensó el campus. ¿Lo volvería a hacer igual?
En primer lugar hablaría del paisaje en mayúsculas. El cambio en la percepción social e institucional hacia el paisaje ha sido muy importante con la aprobación en el año 2000 del Convenio Europeo del Paisaje por el Consejo de Europa, ratificándolo España en 2007.
Básicamente lo que viene a decir es que el paisaje es un elemento importante en la calidad de vida de las poblaciones, ya sean urbanas o rurales, desempeñando un papel cultural, ecológico, medioambiental y social de interés general.
Si reducimos la escala y nos referimos a actuaciones paisajísticas concretas como el campus de la UA, creo que fue pionero en cuanto a concepto, modelo de éxito en su día y es uno de los referentes de nuestro campus, junto con su arquitectura.
Evidentemente ahora no se puede plantear un diseño parecido porque tenemos que afrontar nuevos retos. En un recinto universitario es obligado arriesgar y aplicar la investigación a las soluciones paisajísticas que se pudieran plantear.
¿ Cuáles son sus referencias, buenas referencias, para la etapa actual?. ¿ Dónde se está innovando en paisaje?
Hay muchas, pero me quedaría con todas aquellas que tienden a la renaturalización de las ciudades, a las que apuestan por la recuperación y reutilización para uso público de sus espacios degradados, New York puede ser un buen ejemplo.
En cuanto a innovación puede que China esté a la cabeza. Existen grandes estudios de paisajistas que aplican soluciones basadas en la naturaleza para resolver los graves problemas medioambientales generados por el crecimiento desmesurado de sus ciudades.
Han sido capaces de planificar ciudades desde cero de millones de habitantes, en donde las infraestructuras verdes y el paisaje son la base de su diseño.
¿Cómo cree que ha influido en el paisaje del campus en los universitarios (profesores y alumnos)?
Cuando a principios de los años 90 se llevó a cabo la planificación y el proceso de ampliación del campus hacia la autovía y se eliminó la circulación de vehículos del interior del campus, hubo una cierta oposición porque había que dejar el coche en los aparcamientos perimetrales y andar cinco o diez minutos hacia el lugar de trabajo o de estudio.
Poco duró la oposición, cuando pudieron comprobar lo placentero que era poder caminar por un espacio de calidad rodeado de vegetación y naturaleza. Hoy nuestras zonas verdes forman parte de la identidad del campus y orgullo de profesores, estudiantes y de todo aquel que la visita.
¿El modelo es exportable?
Por supuesto pero con matices, como he dicho antes el modelo del campus fue ampliamente copiado por otras universidades españolas, pero ahora hay que innovar y aplicar nuevas soluciones paisajistas.
¿Qué nuevas soluciones/tecnologías hay que aplicar ahora en los nuevos paisajes?
Todas aquellas basadas en la sostenibilidad y la biodiversidad, como pueden ser las cubiertas verdes y la recuperación del agua de lluvia, minimizar la utilización de pavimentos impermeables, aplicar sistemas de drenaje urbanos sostenibles, la depuración natural de aguas residuales y posterior aprovechamiento, aplicar conceptos de smart cities a la gestión de las zonas verdes, control biológico de plagas, propiciar la convivencia con el ser humano de fauna beneficiosa (colmenas, murciélagos, aves, etc).
¿Qué relación tiene el paisaje con el cambio climático?
El cambio climático es una evidencia y ha trascendido de los círculos científicos a la sociedad.
El individuo debe de ejercer de presión ante sus autoridades para que cambien sus políticas de emisiones y poder reducir el incremento de temperatura del planeta, cuyos efectos ya son palpables, no sólo desde el punto de vista medioambiental como inundaciones, sequías e incendios, sino también sociales con los movimientos migratorios que huyen de la hambruna hacia lo que se supone un mundo “mejor”.
Estos desafíos climáticos tiene como consecuencia la necesidad de aplicar, entre otros, criterios paisajísticos a la planificación y gestión del territorio. En la actualidad no es admisible menospreciar y maltratar nuestro paisaje, con actuaciones urbanísticas y de infraestructuras sin plantear soluciones integradoras.
La profesión de paisajista es transversal y tiene en cuenta soluciones naturales que mitiguen los efectos del cambio climático.
Jose Luis Romeu: La batalla por el valor del paisajismo y el medio natural
José Luis Romeu Lamaignere es ingeniero paisajista, Presidente de la Asociación Española de Paisajistas.(AEP), una institución que trata de reivindicar esta profesión, reconocida en países como Francia, pero no en España, una potencia turística que debería liderar esta batalla.
Ingeniero agrónomo por la Universitat Politècnica de València. Inició su relación con el mundo de la jardinería y el paisajismo en el año 1987 en la empresa Jardinería Huerto del Cura, realizando emblemáticos trabajos como el Hotel Arts y la Torre MAPFRE en la Barcelona olímpica del 92, el Pabellón de Australia en la Expo de Sevilla, el Hotel Príncipe Felipe en La Manga Murcia, el Centro Comercial Moda Shopping en Madrid, etc. Posteriormente, crea la empresa Romeu y Lamaignere Paisajistas, especializándose en la gestión de espacios verdes. Uno de sus trabajos más importantes es el campus de la Universidad de Alicante.
Paralelamente, ejerce su labor como paisajista, habiendo realizado innumerables proyectos, tanto en el ámbito particular como público y colaborando con arquitectos de reconocido prestigio como Alvaro Siza (Rectorado de la Universidad de Alicante), Carlos Ferrater (Paseo Marítimo de Benidorm en colaboración con la paisajista Maria Jover(, Juan Antonio Martinez Lapeña y Elías Torres (Concurso del Mirador del Palmeral), etc.
Una anécdota con la Casa Real
José Luis Romeu fue a principios de los noventa a la Casa Real a recoger la Sequoia que por indicación de su Majestad el Rey, Juan Carlos I donó a la Universidad de Alicante en una campaña del árbol que suscitó donaciones de ejemplares muy valiosos y que se recogen en algunas de las fotos del libro. Romeu ante los riegos de supervivencia de la sequoia intentó que la Casa Real cambiara la Sequoia por otro ejemplar de otra especie que se adaptara mejor al Mediterráneo. José Luis Romeu no cambió la decisión real sobre la sequoia –que todavía sobrevive en las inmediaciones de la Facultad de Derecho- no obstante, ante la contundencia de sus razones, la Casa Real intentó ficharle, sin éxito, y quizás por esta razón hoy podemos leer este libro referido al campus de la UA.