La Universidad de Alicante es la única institución española elegida para dirigir la Cátedra del Metaverso, financiada por parte de los 2,5 millones destinados por Mark Zuckerberg a toda Europa para investigar sobre aspectos jurídicos y éticos el desarrollo responsable del metaverso.
La Cátedra, presentada el 19 de enero en Torre Juana OST junto a Manuel Desantes, Catedrático de Derecho Internacional Privado, abordará aspectos jurídicos y éticos del metaverso. Será dirigida por Aurelio López-Tarruella, profesor de Derecho Internacional en la Universidad de Alicante. Este logro es resultado de 25 años de investigación en Derecho y Tecnologías de la Información por parte de la universidad.
Al evento de inauguración de la catedra asistieron expertos en el Metaverso como David Moreno, CEO de la empresa W3ST; Joaquín Pedreño, CEO de Metasoftware Factory y Jesús Hervás, consultor en la empresa Opportunity además de investigadores, juristas y abogados locales interesados en conocer más sobre el Metaverso y los nuevos retos legislativos que presenta.
Durante el evento, Aurelio López-Tarruella, director de la Cátedra del Metaverso, explicó que inició su carrera en el ámbito tecnológico realizando su tesis doctoral sobre licencias de software en el marco internacional. Ya entonces, comenzó a estudiar los retos de Internet, viviendo la popularización de la Inteligencia Artificial, Blockchain y el Metaverso.
Aurelio López -Tarruella explicó que actualmente desde la Cátedra se enfrentan a un gran reto ya que, según él, el metaverso todavía tiene que configurarse.
El objetivo de la cátedra es dinamizar la investigación sobre el metaverso en España y analizar la legislación para que no sea un obstáculo para el desarrollo del metaverso con la finalidad de que las empresas puedan expandir sus líneas de negocio en este nuevo espacio. El director de la Cátedra aclaró que no van a trabajar únicamente con juristas, sino que necesitan la colaboración de expertos y profesionales de otras áreas que argumenten si la legislación garantiza sus derechos.
Los integrantes de la Cátedra dispondrán de dos años, aunque el objetivo es crear una red capaz de seguir colaborando sin la necesidad de financiación del gigante tecnológico Meta.